En nuestro campo ubicado en el Rincón de Chillar, llevamos a cabo la búsqueda de trufas con la ayuda de nuestros perros. Inspirados en las técnicas tradicionales y respaldados por el conocimiento adquirido y nuestra experiencia.
Guiados por el olfato excepcional de nuestros perros y de la mano de Leonardo Lantz, nuestro entrenador, exploramos cuidadosamente cada rincón en busca de las trufas. Su olfato les permite detectar el aroma distintivo, señalando el lugar exacto donde se encuentran enterradas.
La combinación de la habilidad canina, el entrenamiento y nuestra experiencia en el campo, nos permite descubrir trufas de la más alta calidad. Cada hallazgo es una victoria, un momento emocionante que nos llena de alegría y orgullo.
Valoramos la importancia de preservar la tradición y el legado trufero, y trabajando en equipo con nuestra gente con el objetivo obtener los mejores resultados.
La zona de Chillar, donde cultivamos nuestras trufas, es un lugar privilegiado. Sus condiciones geográficas y suelo calizo proporcionan el entorno perfecto para el crecimiento de las trufas. Aquí, combinamos la belleza del paisaje con el arte de la truficultura, logrando productos de calidad que se destacan en el nuestro país y en el mundo.
Estamos orgullosos de compartir con ustedes la auténtica experiencia de las trufas, cultivadas y encontradas con dedicación y amor.